Carta a
Don Emiliano García, Page de los Reyes Magos
Cuan
lejanas quedan esas ideas y palabras, tan bien presentadas y declamadas, que
ofreció en la cena de gala de lejano II Congreso Nacional de Agentes Forestales
y Medioambientales, allá por el 2013. Llegó representando a nuestros
necesitados Reyes Magos, ofreciéndonos todo el oro, mirra e incienso, básicos
para posicionar en buen lugar a este maltrecho Cuerpo al que usted quería
aupar. En esa noche toledana se quedaron.
Ciudad de la que usted tenía por entonces el bastón de poder, desde la que aspiraba
y decía todo lo que se le ocurría, buscando de los castellano-manchegos
el Presidente ser.
Por
fin llegó su ansiado día, acalorado y celebrado Palacio de Fuensalida. Que
bonitas palabras y cuanto mensaje contenían; …voy a dejarme la piel por
Castilla-La Mancha porque quiero para ella lo mismo que para mis hijos…, …la
dignidad como divisa…, …ejemplo permanente de que no hay que levantar los pies
del suelo… y sobretodo …la renovación de la clase política
tiene que consistir en que no sea clase. Vano mensaje en la parte que
nos toca; imposible que nos colemos en su agenda, es dura como una roca. Ni una
reunión ha mantenido con este colectivo, al que decía que tanto quería y
ayudaría.
Con
tal ilusión prometió, que hasta nos confundió; y creímos ver en su “page” Don
Guijarro al mesías, que portaría todas esas ofrendas con las que nos agasajaría.
Esperanzas se pusieron en sus palabras; imaginábamos del pozo
rescatado al Cuerpo de Agentes Medioambientales vapuleado al que Doña Soriano
lo había arrojado.
La reformada Consejería de Agricultura se volvió a acordar del Medio
Ambiente, aunque con el tiempo comprobando que la distancia entre ambas sigue
aumentando, siendo más larga que el encadenado de los segundos que de su
legislatura están pasando.
Varias reuniones hemos mantenido con su otro “page”, Don Arroyo, que por mucho
que diga no nos saca del hoyo. Aún con talante digno de los Reyes de Oriente,
con su ignorante verborrea y asesoría, nada nuevo decía; y ello nos recordaría
lo que Doña Soriano nos traía.
¡¡ Reuniones; cuántas palabras vacías, cuanto desconocimiento vimos, cuántas
falacias había !!
Pese a esta situación, reciba en estas Navidades la felicitación de esta
asociación; esperando que en su cuento de promesas e ilusiones, de “pages” y
Reyes Magos, no nos traigan mas carbón; cuando usted de lo que nos hablaba, con
cara de bonachón, era de todo el oro que nos traería en su zurrón.